CAPITULO 13 (el polizón)


    Esta semana me toco viajar de nuevo al puerto, cuando le comente a mi hijo no dudo en apuntarse; le dije que yo tenía mi agenda de trabajo ya al full y no le importo; así que nos embarcamos a ruta.

   No puedo decir que me acompaño al trabajo porque tuvimos una junta y obvio el no podía entrar, así que aprovecho para darse la vuelta el solo; aún me cuesta trabajo ver que ya es todo un señor. De cualquier manera fue un viaje extraordinario, tuvimos oportunidad de platicar durante el viaje y recordé cuanto se parece a mí; tengo muy presente cuando me pidió que le enseñara a hacer hot cakes y estoy seguro que adivinaran para que quería aprender.

   El regreso inició con un papá sacando al niño del mar, nunca es suficiente el tiempo en el agua. salimos tarde por cuestiones laborales y decidimos comer en el camino, camino que se interrumpió cuando llevábamos 2 horas de camino a buen paso; pero hubo varios percances en la carretera y estuvimos seis horas esperando que abrieran el paso. Al principio estuvimos bromeando, pero conforme pasaba el tiempo se va haciendo difícil conservar el buen animo, finalmente se quedo dormido y tuve la dicha de verlo dormir de nuevo como cuando era mi bebe; recordé como se identificaba con el Clark de Smallville y me pregunto si algún día se decidirá entre  Lana o Loise.


Como que algo le falto



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